¡Hola! Mi nombre es Cynthia Díaz y les compartiré mi historia porque quiero que otros sepan que tener VIH no es una sentencia de muerte. Si haces el tratamiento, te espera una larga vida.
Solo una persona mal de la cabeza o muy cuerda de la cabeza podría hacer un cambio como las transgéneros lo hacemos. Recuerdo perfectamente algunas palabras de gente de mi entorno